El Séptimo Tribunal Oral de Santiago decretó cadena perpetua para Alexandro Silva de la Jara y 15 años de cárcel para Paula Fernández Crespo -padre y madrastra- tras haber dado muerte en 2014 a una niña de dos años en la comuna de Puente Alto.
El caso se conoció luego que la niña fuera trasladada hasta el Hospital Sotero del Río mostrando severos daños, como consecuencia de haber recibido una serie de golpes en su cuerpo.
Por ello el tribunal sentenció al padre de la menor a la pena solicitada por la Fiscalía por el delito de parricidio, por lo que Alexandro Silva de la Jara tendrá que cumplir 20 años de presidio antes de poder solicitar algún beneficio carcelario.
En el caso de Paula Fernández Crespo, el tribunal la condenó por el delito de homicidio calificado a 15 años de presidio, pese a que Fiscalía solicitó 17 años de presidio.
"La Fiscalía desde el inicio sostuvo que este era un delito complejo, estábamos aspirando a penas altas y el tribunal ha dado la razón a la Fiscalía", manifestó el fiscal Gustavo Ahumada, de la Fiscalía de La Florida.
Además, el persecutor sostuvo que "el tribunal estableció penas altas para este tipo de ilícito, dado que se trata de un maltrato infantil grave respecto de una menor de dos años de edad y del cual solamente fueron los médicos que la atendieron quienes denunciaron, dando cuenta de lesiones que ellos no habían visto en una niña de dos años".
La fiscalía señaló que entre los días 15 y 18 de marzo de 2014, la menor fue agredida tanto por su padre como por su madrastra en el interior de su domicilio calle Pudeto 6579, departamento 1608, de la comuna de La Florida.
Los agresores llevaron a Olivia hasta el Hospital Sotero del Rio, donde tras una semana, falleció producto de la gravedad de sus heridas. Ambos padres fueron acusados de agresión en distintas partes del cuerpo de la pequeña y los exámenes médicos señalaron que presentaba un traumatismo encéfalo craneano, un traumatismo abdominal complicado con amputación de la vía biliar y del conducto pancreático y con perforación del duodeno, lesiones que derivaron en salida del contenido intestinal y en una consecuente peritonitis.
"A consecuencia de ambos traumatismos se provocó el fallecimiento de la menor, el día 26 de marzo de 2014, estableciéndose que la causa de muerte fue tanto un traumatismo abdominal complicado, como una fractura de cráneo en el hueso occipital, lesiones ambas, recientes, vitales y provocadas por la acción inequívoca de terceros", señala el fallo.
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