El incidente se produjo la madrugada de ayer cuando la mujer, residente en el barrio Juan Felipe Ibarra, llegaba a la casa de su pareja y lo divisó junto a otra mujer. Tras observarlo, se percató de que no sólo hablaba con ella, sino que se besaba y acariciaba con la desconocida.
Dado lo anterior, no dudó en acercarse y encarar a su pareja. El sujeto de 26 años, residente en el barrio Colón, que se encontraba en manifiesto estado de ebriedad, al verse acorralado, no encontró nada mejor que comenzar a golpear a su mujer. Lo sorprendente, según fuentes policiales, es que la agresión fue escalando hasta alcanzar el grado de golpiza; alentada por la amante.
Completamente
fuera de sí, y cansado de propinarle golpes de puño en el rostro, comenzó a golpearla
en la cabeza, con los pies. La “amante”, al ver lo grave que se había tornado
el asunto, decidió huir del lugar. El agresor, luego de amenazar de muerte a la
empleada municipal, si es que lo denunciaba; tomó su motocicleta y se dio a la
fuga.
Luego del
brutal ataque, la víctima, se dirigió a la Comisaría Comunitaria 5ta, en donde procedió
a estampar la denuncia en contra de su agresor que, según los primeros indicios,
sería de apellido Goitea y tendría antecedentes por violencia de género.
Como suele
ocurrir en este tipo de casos, la mujer al ser interrogada por la policía respecto
a porque no había abandonado al sujeto, si habitualmente la agredía; declaró que
“le tenía miedo” y que, además; este siempre le decía que “iba a cambiar y que
no volvería a agredirla nuevamente”, por lo que ella lo perdonaba y se
quedaba.
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